martes, 10 de mayo de 2016

Medusa Romero

💞 Medusa Romero  

Ahora que ya no miro con ojos de niña, ahora veo el mundo con ojos de artista , ahora entiendo que tú esencia 
es lo más dulce que perfumara mi vida.

Sé que la felicidad y el sufrimiento 
van de la mano, lo sé desde el primer momento en el que mi corazón empezó a latir en este mundo mortal . Lo sé porque en ese momento, me lo dijeron tus lágrimas.
 
Tus lágrimas en esos momentos 
mezclaban el impacto de mil relámpagos con la auténtica inconfundible felicidad.

Quizá no recuerde,
mis primeros instantes de vida.
quizá ni siquiera sean un reflejo 
de cómo imagino que fueron 
lo que sí recuerdo son las horas, 
los días, los meses que transcurrieron después de ese mes de noviembre. 

Recuerdo todos esos cuentos 
a media noche y como tú voz 
serena me transportaba  a un mundo mágico donde pude creer en las hadas, sirenas y fantasmas. Donde todo era como tú y yo queríamos.

Recuerdo como curabas 
las heridas de mis rodillas y con un beso 
me hacías creer que el dolor desaparecía 
al instante.

Recuerdo cuando me enseñaste 
que el bien siempre triunfa sobre el mal 
Quizá te hayas dado cuenta que recordar 
es  una de mis palabras favoritas 
porque su significado realmente 
me tocó el corazón.

Porque recordar es volver a pasar 
por el corazón y tú eres una de las pocas personas que me hace recordar.

Porque sé que cuando toques mi corazón, tus delicadas manos curaran toda herida 
y lo acariciara deseando que todo el rencor acumulado se pierda.

Y por esa razón hazme recordar 
que siempre estarás a mi lado 
combatiendo conmigo mis peores miedos.

Y por último , gracias por enseñarme 
que la magia si existe 
y que es muy fácil de crear solo necesito, que me abraces fuerte y me susurres
 un té quiero.

Dedicado a mi madre que me enseñó que rendirse nunca es una opción.

Brenda Adame castillo.

martes, 29 de marzo de 2016

Gracias por todo mi gato niebla

http://www.youtube.com/watch?v=ViggFH7h214
2004-2016

A mí gato niebla


No sabía que este día llegaría tan pronto,
asumía que siempre estarías aquí 
en algún rincón de nuestra casa,
escogiendo el mejor lugar para dormir 
ya sea mi cama, el sofá o aquel sillón nuevo del que te percataste en seguida de su llegada, como si fuera para ti.

No había llegado a pensar en lo mucho
que te extrañaría cuando te fueras, 
siempre estabas conmigo 
compartiendo un lugar cómodo 
escuchando mis practicas de piano  
y sintiendo el mundo con mis ojos y tú, gustoso lo aceptabas.

Para ti, yo era tu mundo, 
me amaste antes de que yo me diera cuenta, 
te ganaste todo mi amor, mi cariño 
por tu forma tan peculiar de ser,
lo diste todo y me enseñaste 
el amor incondicional 
porque aún que algunas veces te regañe 
me perdonabas en el momento en que te hablaba.

Mi gato hermoso, de verdad te ame 
como a ninguno, hice lo que pude, 
jamás te abandone, aún que así lo sintieras cuando te deje para que te atendieran,
tenía la esperanza de que regresaras feliz a vivir conmigo otro ratito, 
pero llegue tarde y no pude verte con vida para darte las gracias por estos 12 años juntos.

¿A donde te fuiste? No lo sé,
solo estaba tu cuerpo extendido 
ya sin aliento, ya sin dolor. 
fue rápido aquel instante de agonía
en que se te vinieron de golpe 
todas las estrellas.

Hoy te digo adiós mi gatito hermoso,
el más hermoso que mis ojos pudieran ver.
Te vas mi fiel amigo a ¿dónde?
no lo sé, pero estarás guardado 
en mi corazón por siempre, 
te recordaré desde mi tristeza 
y en medio de mis lagrimas mi corazón 
te besara donde sea que te hayas ido.

Lunes 28 de marzo del 2016
JCR

2004-2016

sábado, 26 de marzo de 2016

Desde mi interior


Alguien se asoma desde mi interior 
con ojos muy abiertos de asombro,
temblando está por salir 
para echarse a correr 
desgarrando todo a su alrededor 
en un ahogado grito de aullido desesperado hasta arrancar varios mechones de cabello que cubren mi cabeza,
para luego caer al suelo en un mar de lagrimas que me arrastran a la puerta del infierno, donde la razón se perdió en medio de mi pecho afligiendo mi corazón con sus latidos sin ritmo, mis piernas se derriten y mis brazos inmóviles hacen que sea un gusano ciego 
que se retuerce en todas direcciones 
hasta que por fin puedo pararme 
y regresar de nuevo a mi amado interior.

JCR
26-03-16